Sara M. Justicia Doll / Primera Hora
En el año 2009, el Gobierno de Puerto Rico pagó a la compañía Skanska Puerto Rico Pipeline $59 millones por concepto de la terminación del contrato que se había concretado con dicha empresa para la construcción del gasoducto del sur, bajo la administración de Aníbal Acevedo Vilá.Pero con la administración popular se fue el tubo y el gobierno actual determinó sustituir el tubo de gas por un tubo de agua.
Dos años más tarde, la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados(AAA) informó ayer que presentará la Declaración de Impacto Ambiental(DIA) del Acueducto del Sur.
Esta infraestructura utilizará aquellos tubos, válvulas, diseños y estudios que se hicieron para el gasoducto del sur pero que nunca cobraron forma.
Además, se invertirán otros $50 millones para la mega- obra de infraestructura lo que representa la friolera de $109 millones en un proyecto que, muy cerca del periodo eleccionario, resulta incierto que se concrete.
Los $59 millones que Skanska se embolsilló sin completar el gasoducto del sur constan en la terminación del contrato firmado por el también entonces director ejecutivo de la Autoridad de Energía Eléctrica(AEE), Miguel Cordero y el representante de Skanska Puerto Rico Pipeline, José Carrión Salvá, en el año 2009.
“Los $59 millones fueron para cancelar el contrato a Skanska, adquirir la servidumbre, la tubería, las válvulas, el diseño y ciertos estudios”, dijo ayer el director de infraestructura de la AAA, Alberto Lázaro.
Actualmente, todo ese material está custodiado por la Autoridad para el Financiamiento de la Infraestructura de Control Ambiental(Afica).
El traspaso de los materiales a la AAA será en agosto.
La DIA será presentada en junio y una vez aprobada la construcción del proyecto se hará en fases. El extinto gasoducto del sur discurría entre Guayanilla y Guayama. Pero, el acueducto del sur contempla una ruta más extensa desde Patillas hasta Peñuelas.
El propósito del acueducto del sur es suplir agua potable a sectores de Ponce, Juana Díaz, Salinas, Coamo, Guayama, Arroyo, Patillas y partes de Peñuelas.
Busca evitar la explotación del acuífero del Sur
Según explicó Lázaro, el acueducto del sur se nutrirá de los embalses como el lago Toa Vaca, en Villalba, el lago Patillas y quizás el lago Cerrillos.
De acuerdo con el ingeniero, a Toa Vaca y Cerrillos les sobran 10 millones de galones diarios. A Patillas se le pueden sacar siete y a un lago en Peñuelas otros seis. La proyección es que el acueducto del sur transporte de 20 a 25 millones de galones.
“Se busca evitar la explotación de los acuíferos del sur con pozos y utilizar agua superficial de los embalses como el lago Toa Vaca, en Villalba, el lago Patillas y quizás Cerrillos. Actualmente, se extraen de cinco a diez millones de galones diarios de los acuíferos del sur”, agregó el ingeniero.
La situación que enfrenta la Isla, en particular los acuíferos del sur, es que están siendo sobreexplotados porque se saca más agua hincando pozos de la que entra por las montañas.
La construcción del acueducto del sur comenzará en el 2012.
Aún no se precisa cuál será el tramo que se construirá primero si el de Coamo a Salinas o el de Ponce, que se supone supla al Puerto de las Américas.
Tubos de controversia
Los propuestos acueductos, tanto el gasoducto del sur, propuesto por Acevedo Vilá, y el gasoducto Vía Verde han provocado ronchas en la sociedad.
Existen comunes denominadores entre ambos tubos.
La oposición de ambos proyectos sostiene que éstos enriquecen a unos pocos que se llevan los millones, aun cuando el tubo ni siquiera se construya.
También son las comunidades menos afortunadas las que se ven perjudicadas.
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